Sinopsis
Diecinueve personas son asesinadas al día en Honduras, el país sin guerra más violento del mundo. La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito le adjudica una tasa de 80 homicidios por cada 100.000 habitantes. México, el supuesto paradigma de la violencia criminal, tiene una tasa de 21, tres veces menos.