Sinopsis
La reina rusa de la electrónica llegó a Sonar para cerrar una edición única gobernada por mujeres. Una sesión irrepetible en la que su sello de cara sonriente preside en un amanecer inolvidable, marcado por el baile y el 'techno' aventurero.
Nina Kraviz no decepcionó en aquella esperadísima sesión del cierre de Sónar en 2017. Rodeada por un público dispuesto a darlo todo en la última gran sesión de la noche, Kraviz navega por los recovecos del 'techno', contagiando al público de sus ganas de bailar y pasarlo bien. Convertida ya en una estrella mundial, Kraviz forma parte de los carteles de los festivales más importantes del mundo y los clubes más emblemáticos.
Sus sesiones son imparables, enganchando 'hits' con mezclas inéditas con las que sorprende en cada sesión hecha a medida de cada concierto. Amor infinito a la tradición y locura por el 'techno' más atrevido son sus mejores cartas. Inolvidable.